La evolución de todo lo que existe – Clarity
Este video fue hecho gracias al libro Clarity: un modelo unificador de la ciencia y un relato
del todo, escrito por Daniel San Martín ¡Que está lleno de ideas fascinantes! Algunas
de ellas aparecen en el episodio de hoy…
¡Fusión estelar, guerras entre civilizaciones, mutaciones, la conciencia, liberales contra
conservadores, la inteligencia artificial y las religiones! La diversidad de fenómenos
en el universo parece abrumadora. ¿Qué tienen en común la formación de los átomos y la
gestación de un ser humano? ¿En qué se parecen la evolución del cerebro y el desarrollo
de los grandes Imperios? Parecen fenómenos sin ninguna relación, pero ¿es posible entender
la historia del mundo de una forma unificada, como un todo claro y coherente? Acompáñanos
a conocer un modelo que nos da claridad acerca de…
La evolución de todo lo que existe.
Comprender el cosmos en su conjunto y encontrar los patrones en común entre las diversas
disciplinas ha sido una aspiración de filósofos y científicos. A principios del Siglo Veinte,
el jesuita y filósofo Pierre Teilhard integró en un sólo relato el big bang, la evolución
biológica y la cultural y el crecimiento moral: para él, todo formaba parte de un
gran proceso, y ese proceso tenía un sentido, una dirección. Algo análogo hizo Daniel
San Martín en su libro Clarity: construir un relato que echa luz sobre fenómenos tan
dispares como el origen de la vida, por qué existe el sufrimiento, por qué existen las
guerras, y hasta nuestro posible futuro como especie.
Para ello, Clarity aborda una pregunta central: si al principio sólo había partículas dispersas
en el espacio ¿cómo se formaron los objetos? ¿Cómo se fueron generando las estrellas
y planetas? ¿Cómo fue que en uno de esos planetas se formaron células, personas y
sociedades? El hilo conductor de este gran relato es el concepto de complejidad. En su
libro, San Martin estructura el aumento de la complejidad de los objetos del cosmos en
seis niveles: La organización del universo: inicia con
la formación de los átomos, incluye la formación de estrellas y planetas y concluye con la
constitución de moléculas complejas en la Tierra.
El origen de la vida, parte del surgimiento de moléculas autorreplicantes como el ARN
y el ADN, y concluye con la aparición de la célula.
El desarrollo de la conciencia: cómo las células fueron formando organismos multicelulares,
finalizando con la conformación de animales con la facultad de experimentar sensaciones
y percibir su entorno. El auge de la inteligencia, de cómo criaturas
con cerebros muy simples terminan dando paso a animales con la capacidad de razonar: los
seres humanos. La aparición de costumbres y creencias: en
este nivel, las comunidades humanas fueron desarrollando culturas y creencias cada vez
más sofisticadas. El resultado, como veremos, fue la conformación de las civilizaciones.
La aparición de las naciones. En este nivel se relata cómo las sociedades evolucionaron
a través de la Historia, proceso que concluye con el mundo de naciones en el cual hoy vivimos.
El autor de Clarity propone también una séptima etapa: la de nuestro futuro como humanidad,
¿a dónde nos llevará el incremento de la complejidad?.
Cada uno de estos niveles se caracteriza por la aparición de objetos cada vez más complejos,
a partir de la agrupación de los objetos más sencillos, interactuando en un patrón
muy preciso. Por ejemplo: los átomos constituyeron moléculas, éstas se agruparon en células
que dieron forma a animales. Luego, uno de estos animales, el ser humano, conformó comunidades,
éstas dieron lugar a civilizaciones, y finalmente todas ellas se están uniendo hoy para formar
una gran sociedad global. San Martín propone que la transición de un nivel de complejidad
al siguiente se da siempre del mismo modo, en cuatro pasos que se repiten una y otra
vez:
Aparición Selección
Cooperación y Especialización.
Veámoslo con ejemplos, nivel por nivel: No sabemos cómo ni porqué, pero al inicio
sólo había partículas fundamentales. Tres de ellas son importantes para este relato:
los electrones, los quarks arriba y los quarks abajo. Gracias a la interacción nuclear fuerte,
los quarks empezaron a interactuar entre sí, formando protones y neutrones. Estos se juntaron
entre sí y a su vez, gracias al electromagnetismo, atrajeron electrones: estamos ante la APARICIÓN
de los primeros átomos. Los de hidrógeno y helio resultaron muy estables, por lo que
podemos decir que fueron SELECCIONADOS para agruparse en grandes cantidades formando los
objetos que conocemos como estrellas. Las estrellas permitieron la formación de átomos
más complejos, que, una vez liberados, comenzaron a COOPERAR, dando forma a complejas moléculas
en algunos planetas. Entre ellos el de carbono que, debido a sus propiedades, puede interactuar
con muchos tipos de átomos. En nuestro planeta, la Tierra, el carbono se ESPECIALIZÓ en formar
moléculas muy complejas llamadas orgánicas, entre ellas una que tenía la capacidad de
copiarse a sí misma. Así APARECIÓ el ARN. El proceso de SELECCIÓN
natural impulsó la complejización del ARN, en la que proliferaban aquellas moléculas
con mejor capacidad de copiarse. Algunas moléculas de ARN comenzaron a COOPERAR para reproducirse
juntas hasta que adquirieron la capacidad de producir proteínas que favorecieron su
conservación y reproducción. El ARN evolucionó hasta dar origen al ADN, molécula ESPECIALIZADA
en reproducirse en grandes grupos moleculares. Los grupos moleculares con más posibilidades
de sobrevivir fueron los que crearon una barrera de lípidos a su alrededor: así APARECE la
célula y, con su capacidad de producir permanentemente sus propios componentes, surge lo que llamamos
vida. Sobrevivieron por SELECCIÓN natural aquellas células con mayor capacidad de extraer
energía. En algún momento algunas de las células complejas comenzaron a COOPERAR entre
sí, formando colonias que conocemos como organismos multicelulares. Luego, las células
de estas colonias se diferenciaron, tomando diferentes funciones. Por ejemplo, algunas
se ESPECIALIZARON en comunicar información y formaron las primeras redes neuronales,
capaces de experimentar sensaciones y de aprender, es decir, con la propiedad de la conciencia.
Tras la APARICIÓN de animales con conciencia, la SELECCIÓN natural impulsó el desarrollo
de cerebros cada vez más complejos. Con esa capacidad los animales empiezan a COOPERAR
entre sí de formas cada vez más sofisticadas. En el caso de los primates, esto da origen
a grupos sociales con estructuras complejas, que a su vez favorecieron un proceso de ESPECIALIZACIÓN
del cerebro. Ello propició el desarrollo de cerebros cada vez más grandes, capaces
de manejar las crecientemente complejas relaciones sociales. El resultado de este proceso fue
el ser humano y su enorme cerebro. Lo anterior implicó la APARICIÓN de las
comunidades humanas, caracterizadas por interacciones sociales extremadamente complejas, que da
como resultado la generación de conocimientos que trascienden la vida de sus miembros. A
ese conocimiento lo llamamos cultura. Por un proceso de SELECCIÓN permanecieron y crecieron
aquellas comunidades con culturas que se adaptaban de manera más efectiva a su medio ambiente.
Con el tiempo, algunas comunidades comenzaron a establecer alianzas entre sí, incluyendo
el trueque de parejas, lo que permitía elevar la diversidad genética de los grupos. Esta
COOPERACIÓN tuvo como resultado la existencia de ancestros comunes, lo que permitió la
interacción permanente de estos grupos y la formación de clanes. Como te contamos
en el video sobre la evolución de Dios, ciertas características de nuestra mente, nos hacen
notar que otros seres tienen intenciones y nos permiten anticipar sus actos, y al mismo
tiempo nos hacen pensar que detrás de los fenómenos naturales hay seres con conciencia:
dioses y espíritus. Dentro de cada clan surgió un rol ESPECIALIZADO: los sacerdotes, encargados
de la comunicación con los ancestros y los espíritus. Esto permitió el desarrollo de
las religiones y con ellas, muchas comunidades se congregaron bajo una sola identidad en
común. La identidad común permitió la APARICIÓN
de las grandes civilizaciones. En los siguientes siglos, las guerras entre estas sociedades
impusieron un proceso de SELECCIÓN, en el cual solo las civilizaciones militarmente
fuertes sobrevivían. Esto favoreció el crecimiento poblacional, la jerarquización de las sociedades
y la aparición de los estados: surgen los imperios por todo el mundo. De forma más
o menos paralela a la guerra, algunas civilizaciones comienzan a COOPERAR entre sí a través del
comercio, Las redes comerciales se hacen vastas por todo el mundo. Tras el descubrimiento
de América, las civilizaciones de Europa se ESPECIALIZAN para beneficiarse del comercio
internacional: para ello definen fronteras claras, desarrollan instituciones financieras
y políticas que favorecen el comercio. En otras palabras, las civilizaciones de Europa
se transforman en naciones modernas. Al cabo de algunos siglos, el resto de las sociedades
siguen sus pasos, y se termina por configurar el mundo actual.
Al revisar la evolución de todo lo que existe a través del cristal de este relato, podemos
obtener algunas conclusiones interesantes. Primero: incluso los objetos más grandes
y complejos, como las sociedades humanas, están formados por las mismas piezas básicas:
quarks y electrones. Así, todas las propiedades interesantes de nuestro universo no son resultado
de sus piezas, sino del patrón dinámico de sus interacciones. Por ejemplo: la vida
no es más que un patrón de interacciones de alta complejidad entre moléculas no vivas.
A su vez, aunque cada neurona no es consciente, la conciencia es resultado de un patrón de
interacciones neuronales. Y los seres humanos somos como somos debido a que esos patrones
han ido evolucionando a lo largo de nuestra historia de evolución biológica. Pero no
solo eso: de las interacciones entre nosotros, han surgido las creencias y las costumbres
que dan origen a nuestras sociedades y a nuestra forma de experimentar el mundo.
¿Y el futuro? Teilhard vislumbraba un momento llamado el Punto Omega, en el que se imaginaba
que surgiría “una colectividad armonizada de conciencias, una superconciencia.” La
pluralidad de las reflexiones individuales agrupadas en una reflexión unánime. Pero
¿qué piensa Daniel San Martín a partir del modelo Clarity?
A mi parecer, estamos en el primer paso ya de la formación de un nuevo nivel de complejidad.
Ya ha APARECIDO una sociedad global, la Humanidad, que vincula estrechamente a las naciones del
planeta. En el futuro cercano, la humanidad enfrenta una suerte de SELECCIÓN: o aprendemos
a producir energía sin sacar de balance a nuestro planeta, o la humanidad como la conocemos
dejará de existir. Mirando más hacia el futuro, y siendo optimista, creo que la inteligencia
humana se beneficiará de COOPERAR con otro tipo de inteligencia: la artificial. Y ya
mirando al futuro distante, creo que podremos aspirar a una humanidad ESPECIALIZADA en colaborar
con la inteligencia artificial, con lo cual podremos lograr los grandes sueños de nuestra
especie: derrotar a la muerte, abolir el sufrimiento y acopiar conocimiento infinito. ¡Quizás
hasta podremos trascender las limitaciones más fundamentales y producir materia y energía
de la nada! Eso significa que podremos incluso ¡Crear nuevos universos!
¡Wow! Te invitamos a conocer el libro Clarity, donde, dentro de esta fascinante perspectiva
se responden preguntas como ¿por qué existen la vejez y la muerte? ¿El razonamiento realmente
surgió como mecanismo para conocer la verdad o evolucionó para otras funciones? ¿El amor
romántico tiene una función evolutiva? ¿Por qué existe el sufrimiento? ¿Por qué existe
el chisme? ¡CuriosaMente! Adquiere Clarity de Daniel San Martín en
su página web: aimclarity.com ¡Te dejamos el link en la descripción! También está
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