Español Ágil | Efficient training of Spoken Spanish listening | Intermediate Level (1)
E54: Español Ágil
Hola, hola, ¿cómo va la semana? Ya estamos a mitad de mayo. No sé si sientes lo mismo pero a
mí estos primeros meses se me han pasado volando. A pesar de las continuas cuarentenas y estar en
casa tanto tiempo siento que los primeros meses del año han pasado en un abrir y cerrar de ojos.
Si es la primera vez que escuchas este pódcast, te doy la bienvenida,
mi nombre es César, soy profesor de español y creo contenido para
estudiantes de nivel intermedio. Además de escuchar el pódcast, también puedes
leer la transcripción de todos los episodios de forma gratuita en www.spanishlanguagecoach.com
Hoy es 13 de mayo y hace un par de días el día 11 finalmente lanzaba al mundo “Español Ágil”,
mi curso online para estudiantes de nivel intermedio. ¡Finalmente,
por fin! ¡Muchas gracias a las personas que ya se han inscrito y ya están aprendiendo
con él! Si tienes curiosidad puedes ir a www.spanishlanguagecoach.com y echar un ojo,
echar un vistazo. Recuerda que puedes inscribirte hasta el sábado 22 de mayo.
En el episodio de hoy vamos a hablar de cómo la idea de este curso está
conectada con un problema y una gran frustración que sufría en el año 2012,
hace casi 10 años. Te voy a contar también las ideas que he tenido en cuenta a la hora de crearlo
y cómo tú puedes aplicar esas mismas ideas en tu rutina de estudio del español u otro idioma.
Te decía que en el año 2012 yo me sentía frustrado y diría algo preocupado también.
A principios de año, en febrero si no recuerdo mal, me confirmaron que iba a estudiar a partir
de septiembre en la universidad de Londres. En ese momento tenía un nivel intermedio de inglés,
de hecho tenía el certificado de nivel B2. Además, había estudiado inglés toda mi vida.
En el episodio 19 mi amiga Inma y yo te hablamos de la relación de los españoles con los idiomas.
Te contábamos que aunque empezamos a estudiar inglés de forma obligatoria desde los 7 hasta
los 16 años, pues la mayoría de españoles no no sentimos preparados para comunicarnos en inglés.
Yo estaba preocupado porque en ese momento trabajaba en la tienda de teléfonos móviles
mientras estudiaba en la uni y venían muchos turistas hablando en inglés. Y sí,
podía comunicarme con ellos porque conocía la gramática bien y mi vocabulario era bastante
decente pero no me sentía cómodo. Sentía que necesitaba pensar antes de formular una pregunta,
cambiando el orden de las palabras, no estaba seguro de usar las preposiciones correctas,
no podía usar los pronombres con facilidad… este tipo de cosas me hacían sentir inseguro.
En definitiva no tenía agilidad, no tenía fluidez con el uso oral del idioma,
no hablaba con agilidad. Podía leer, escuchar y escribir inglés sin mucho problema pero la
expresión oral todavía me frustraba. Quería una solución porque no quería
tener problemas para comunicarme cuando me mudara a Londres el siguiente septiembre.
Empecé a usar un libro de gramática, muy bueno por cierto, un libro de nivel intermedio con 200
páginas y lo hice entero, entero. Creo que es la primera y única vez que he terminado un libro de
ejercicios de gramática completo. La verdad es que estaba muy motivado con la idea de irme a vivir a
Londres en unos meses, así que lo di todo, hice un esfuerzo grande y hacía varías páginas cada día.
La verdad es que hacerlo me ayudo mucho,
especialmente a mejorar la expresión escrita. Tenía una idea todavía más clara del uso de
la gramática y podía usar conectores con más facilidad por ejemplo. Sin embargo,
continuaba teniendo el mismo problema a la hora de expresarme con facilidad.
Hablando de este problema con mi amigo que también estudiaba inglés, me comentó que él
había hecho un curso de Vaughan, que es un profe de inglés muy conocido en España, que
le había gustado mucho y había visto resultados muy buenos en su inglés. Por cierto, el método
de compra del curso era bastante curioso. No sé si esto existe en otros países pero mi amigo no pudo
comprar el curso completo de una vez, sino que cada semana compraba una unidad del curso junto
al periódico. Tenías que comprar el periódico los domingos y si querías el curso pagabas un
suplemento. Mi amigo me contaba enfadadísimo que odiaba tener que comprar ese periódico porque la
linea editorial era completamente contraria a su ideología política. La cosa es que Juanjo,
mi amigo, me prestó el curso para que lo hiciera y la verdad es que me ayudó muchísimo. Era
algo completamente diferente a lo que había hecho antes, un modo de estudiar diferente,
y sobre todo vi lo beneficios de usarlo; empezaba a dominar la gramática correspondiente a mi nivel,
podía expresarme en inglés con mucha más facilidad, sin tener que pensar constantemente
cuál era el participio irregular correcto o qué pronombre usar en cada frase. Y lo más importante,
eso me hacía sentirme más seguro cada vez que tenía que hablar en inglés. No me dio
tiempo a acabarlo antes de irme a Londres pero me lo traje conmigo y seguí haciéndolo aquí.
Aquí hago un pequeño paréntesis porque sé que este pódcast lo escuchan muchos hispanohablantes
también, así que si eres hispanohablante y tienes interés en aprender inglés o mejorarlo,
te recomiendo que veas la web de Vaughan, de este profe, porque sus cursos merecen mucho la pena.
Bueno, te contaba esto porque cuando decidí que quería hacer un curso de español para estudiantes
de nivel intermedio tuve que hacer una lluvia de ideas o brainstorming, porque ahora los españoles
usamos el anglicismo también y el estilo de este curso de inglés estaba muy presente,
ya que me ayudo muchísimo. Hice una lluvia de ideas sobre el tipo de curso que quería
hacer. Tuve que volver al pasado y pensar qué necesitaba y cómo me sentía siendo un estudiante
de inglés intermedio. Pensaba también en la persona que consume habitualmente mi
contenido como tú y en todos los comentarios que he recibido en los dos últimos años desde
que existo en el mundo de Internet. Por supuesto también tuve en cuenta
mi experiencia como profesor de español y las necesidades de mis estudiantes de este nivel.
Además yo consumo muchos cursos online. He hecho cursos de idiomas por supuesto, pero también de
formación como profesor, edición de vídeo, Photoshop o gestión del tiempo. Todos estos
cursos me han ayudado a entender qué es lo más útil para ponerlo en práctica en “Español Ágil”.
Ya te comenté la razón por la que el curso se llama “Español ágil”. Ágil es un adjetivo que
viene del latín “agilis” que significa ligero, rápido en el actuar, activo. Y como el objetivo
es que actives tu español, me parecía que “Español ágil” era un nombre perfecto.
Algo importante es que el curso no es para todos los estudiantes. Ni siquiera es para todos los
estudiantes de nivel intermedio. Te explico. En el eBook gratuito “La guía del estudiante de español”
te hablaba de la necesidad de tener una rutina de estudio equilibrada donde hubiera actividades
de producción y de no producción. Lo que estás haciendo ahora mismo, escuchar el pódcast, es
una actividad pasiva o de no producción, no estás produciendo español. Es por supuesto importante
porque te ayuda con la comprensión del idioma. Sin embargo, si quieres un progreso en tu nivel
necesitas una rutina que combine los dos tipos de actividades; de producción y de no producción.
El curso te ayudará también a mejorar la comprensión porque
vas a estar muchas horas escuchándome pero lo más importante es que vas a tener que hablar,
producir el idioma oralmente, crear el idioma. Te voy a hacer preguntas,
me vas a hacer preguntas, vas a transformar frases, vas a crear oraciones a partir
de imágenes… bueno a través de diferentes ejercicios vas a practicar tu expresión oral.
Por eso te decía que este curso no es para todos los estudiantes. Este no es el típico curso donde
escuchas una explicación y después haces los ejercicios de un documento pdf sino que está
basado en ganar agilidad con las principales estructuras gramaticales del nivel intermedio
y lo hacemos hablando. Es un curso de 35 días en vídeo y lo puedes hacer cuando quieras. No es
necesario que hagas una lección al día, de hecho yo te recomiendo espaciarlas
un poco. No voy a leer la lista de las 35 unidades pero en la página web puedes ver
el curriculum completo. Básicamente cada una de las unidades cubre uno de los aspectos más
importantes del nivel intermedio, los errores y confusiones más frecuentes.
El curso lo he hecho con la ayuda de 15 estudiantes de español, los estudiantes
BETA como yo los llamo, que muy amablemente me han dado su feedback en los últimos meses sobre
lo que más les gustaba y sobre lo que les ayudaba más a ganar fluidez. Desde aquí os doy la gracias
de nuevo a cada uno de vosotros por responder a todas mis preguntas y por hacer el curso.
Uno de los comentarios más comunes de estos estudiantes es que les daba la sensación de
que estaban haciendo una clase 1-1, una clase online conmigo. Era lo que más les gustaba,
la sensación de cercanía. Durante el curso trabajaremos, y mucho,
la agilidad de tu español pero de vez en cuando también te contaré algún dato interesante sobre
España o una anécdota para que sientas que estamos trabajando juntos tú y yo.
Algo que también te recomiendo añadir a tu rutina de estudio es el factor estrés. Y ahora
te estarás preguntando: ¿y por qué quiero yo estresarme aprendiendo español? Bueno,
el estrés está presente en nuestra vida lo queramos o no y no siempre es negativo.
Cuando alguien te pregunta en español algo y tú no sabes responder porque no recuerdas la conjugación
irregular de un verbo o te falta vocabulario, entra en juego el factor estrés. Quieres
responder rápido y evitar ese momento incómodo. La forma de simular ese estrés en el curso es
usando el tiempo. Cada vez que tengas que decir algo tendrás solo unos segundos para hacerlo,
verás un cronómetro en la pantalla y lo ideal es que respondas antes de que el cronómetro
llegue a cero. Dependiendo de tu nivel lo vas a conseguir o no. Si no lo consigues y
necesitas más tiempo siempre puedes pausar el vídeo y después responder. Sin embargo,
el objetivo es que respondas en el tiempo que te doy, eso significara que tu conocimiento
se ha automatizado, de la misma forma que hablamos nuestro idioma nativo de forma automática,
sin pensar en conjugaciones u orden de las palabras. Por eso, dependiendo de tu nivel
vas a hacer cada lección una vez o más veces si todavía no lo has automatizado.
Otra cosa que te recomiendo a la hora de trabajar tu español es pensar en la naturalidad y en
la frecuencia de uso. Yo tenía una estudiante británica que siempre me decía: “César, enséñame
solamente estructuras en español que tengan una traducción similar en inglés”. Yo le decía que
eso no era buena idea porque algo correcto no es siempre lo más natural. Te pongo un ejemplo.
Cuando hablamos de una acción que empezó en el pasado y continua en el presente podríamos usar
diferentes estructuras. Me podrías preguntar: “César, ¿cuánto tiempo has estado viviendo en
Londres?”, lo cual es correcto en español, pero no suena tan natural como decir: “César, ¿cuánto
llevas en Londres?”. Conocer estas fórmulas no solo dan naturalidad a tu español sino que también
mejoran tu comprensión cuando hablas con nativos que las usan. En todas las lecciones del curso he
puesto el énfasis en que el estudiante aprenda el español más natural posible, no solo el correcto.
También te hablaba de la frecuencia de uso. Si aprendes una nueva palabra en español te
recomiendo valorar su frecuencia de uso. Es imposible intentar memorizar y retener cada