¿Cómo ser políglota?
Fushigi ni , bifudul, periérga, curiously, curieusement, curiosamente ¿te gustaría
poder hablar muchos idiomas? Hoy te contamos: ¿Cómo ser políglota?
Este video se hizo gracias a la colaboración de Duolingo, aprende un idioma gratis y diviértete.
Hay algo de controversia sobre lo que significa ser políglota. Algunos consideran que debes
saber leer, escribir y comunicarte a la perfección en varios idiomas. Otros, piensan que con
tener un diálogo y escritura fluidas usando unas 2 mil ó 3 mil palabras es suficiente.
En lo que sí coinciden es que debes saber por lo menos cuatro lenguas diferentes.
Ziad Youssef Fazah habla 15 idiomas diferentes con fluidez y con un poco de preparación
puede hablar 44 idiomas más. A los 14 años decidió que quería aprender todos los idiomas
del mundo. Para ese entonces ya hablaba francés, inglés y su lengua materna, el árabe. Pero
el récord en poliglotismo lo tiene Emil Krebs. Podía hablar y escribir en 68 idiomas diferentes
y conocía un total de 120 lenguas y dialectos. Al morir, su cerebro fue conservado para la
investigación. Al parecer su Área de Broca se había desarrollado de manera diferente
. ¿Para qué aprender tantos idiomas si tenemos
un precioso traductor que hace todo? Pues para empezar, hablar uno o dos idiomas extras
te podría abrir las puertas a trabajos increíbles. Un estudio demostró que los niños que migraron
a Estados Unidos de pequeños y aprendieron inglés, de adultos, ganaban entre 2100 y
3300 dólares al año más que aquellos que no aprendieron.
La hipótesis Sapir–Whorf dice que el lenguaje que usamos afecta nuestros patrones de pensamiento
y cómo percibimos el mundo. Quienes hablan más de un idioma reportan que se sienten
como si tuvieran diferentes personalidades. Un proverbio checo dice: “Aprende un nuevo
idioma para conseguir un alma nueva”. Y si no consigues un alma nueva, por lo menos
los idiomas son la ventana para conocer y entender diferentes culturas. Ludwig Wittgenstein
escribió: “los límites de mi lenguaje son los límites de mi mundo“.
El lenguaje no solo es la forma en la que nos comunicamos. También cuenta la historia.
Por ejemplo, a partir de las misiones lunares en Estados Unidos se usa la expresión “moonshot”,
“disparo a la luna” que se usa para hablar de un proyecto muy ambicioso, casi imposible.
El lenguaje revela los valores. En Japón se considera de mala educación contestar
“no” a una pregunta ¡demasiado directo! y generalmente se usan frases para responder
dando rodeos. Los japoneses consideran importante mantener la paz: una persona debe ser flexible
y poco demandante. El idioma también es una muestra de cómo se vive el día a día. En
México “ahorita” no quiere decir lo mismo que el “ahora” en cualquier otro país.
“Ahorita” puede que quiera decir “en un momento”, “en un futuro indefinido”
o “justo ahora”, todo depende de la situación. Lamentablemente el idioma también refleja
nuestros prejuicios . Conocer otras lenguas te da la oportunidad de ver la vida de otras
formas. Suena maravilloso saber muchos idiomas, pero
quizá ahora te parece muy difícil porque, claro, era más fácil aprenderlos cuando
eras pequeño. ¡Pero no pierdas la esperanza! Benny Lewis es políglota y aprendió su segundo
idioma hasta los 21 años. Antes de eso ya tenía clases de idiomas en su escuela y no
era capaz de entender ni de pronunciar una sola palabra. Logró aprender otras lenguas
sólo cuando descubrió su propio método de aprendizaje. La ventaja de aprender un
idioma cuando eres grande es que tú ya sabes cómo aprendes y puedes adaptar tu aprendizaje
a tu propio método.
Si puedes entender este video ya sabes un idioma: el español. Aprender un segundo no
es descabellado. El vocabulario y la gramática tienen similitudes entre lenguas. Los idiomas
están conectados. Hay muchas palabras que se dicen casi igual en varios países, por
ejemplo, hola, hello , hallo (HALO), halo (ALO) o la palabra nación , nation, nation,
nazione (NAASI). Buscando palabras comunes ya tienes bastante vocabulario. La gramática
también suele tener una estructura similar en todos los idiomas. Christopher, un savant
con una increíble habilidad para aprender nuevos idiomas fue puesto a prueba para conocer
cómo aprendemos una lengua nueva. Se le enseñó berber, que es un idioma de África y epun
un idioma inventado. El epun inventado tenía una estructura y reglas gramaticales artificiales.
Christopher no tuvo dificultad en aprender berber en poco tiempo, pero el epun le resultó
sumamente difícil. Así se comprobó que, aunque haya diferencias notorias en la gramática,
existe una estructura central universal, compartida por todas las lenguas naturales humanas. Cuando
aprendes un nuevo idioma transfieres las reglas gramaticales de tu lengua materna y las adaptas
al nuevo idioma. Aún así ¿te intriga saber algunos de los
métodos que usan los políglotas? aquí van algunos tips que dan:
1. Estudia. Ya sea que vayas a clases, aprendas a través de plataformas o libros fija un
horario para estudiar y practicar. Y haz horas extras: usa tu tiempo libre para seguir practicando.
Practica constantemente el idioma que estás aprendiendo y todos los que ya aprendiste
porque un idioma se olvida fácilmente. En niños menores de 12 años se ha visto que
pueden olvidar completamente su lengua materna si la dejan de hablar.
2. Vive el idioma. Escucha música, podcasts y ve películas en el idioma que estás aprendiendo.
Cuando lo hagas imita la mayor cantidad de sonidos, palabras y oraciones. Busca libros
de frases que se usan en ese idioma. Lee el mismo libro en los diferentes idiomas que
vayas aprendiendo, busca libros fáciles y que te gusten. Cambia el idioma en tu celular.
Escribe un diario en otro idioma. 3. Usa mnemotecnias. Aprender vocabulario
es importante, pero si intentas memorizar palabras como perico resulta casi imposible.
Es mucho más efectivo vincular las palabras con algo. Inventa canciones o cambia la letra
a canciones que ya sabes para integrar las palabras nuevas. Aprende por grupos de palabras
que se parecen fonéticamente, aunque no tengan relación en significado. Crea una pequeña
historia donde incorpores las palabras que quieres aprender. Usa la técnica del “palacio
de la memoria”: piensa en un lugar que conozcas a la perfección, y conecta las palabras nuevas
con diferentes espacios o detalles de ese lugar mientras haces un recorrido mental por
ese lugar. O simplemente une las palabras con sentimientos, lugares o con olores, incluso
con alguna experiencia. 4. Háblalo ¡Sin sentir vergüenza! Busca
comunidades en línea para hacer intercambios de idiomas. Encuentra personas que hablen
el idioma. No importa que tu vocabulario sea limitado o que no sepas gramática. Los niños
son excelentes para aprender idiomas, no solo por la plasticidad de su cerebro: en gran
parte se debe a que no tienen vergüenza. No les da pena cometer errores o inventarse
palabras, tampoco se sienten cohibidos cuando hacen reír a sus padres por las cosas que
dicen o intentan decir. Comete errores y aprende de ellos.
5. Diviértete. Usa el método que más te funcione y el que más disfrutes. Aprender
un nuevo idioma lleva tiempo, pero si resulta en algo que disfrutas verás que resulta mucho
más fácil. Descarga una aplicación para aprender y practicar en cualquier lugar y
en cualquier momento. ¡Curiosamente! Un idioma resulta más fácil de aprender
¡cuando te diviertes! Y mucho mejor si es gratis. Aprender inglés o 95 idiomas más
no cuesta nada con Duolingo. ¡Aprende lenguas gratis y diviértete! Descarga la aplicación
en el link que te dejamos en la descripción.