¿Cómo cambian de color los animales que cambian de color?
CAMALEÓN 1: ¡Ora, estás en mi ramita! CAMALEÓN 2: ¡No no no, esta es MI ramita!
CAMALEÓN 1: Fuchi, hágase para allá CAMALEÓN 2: ¿A si? Pues toma
CAMALEÓN 1: ¡Ah! ¡pues toma eso! CAMALEÓN 2: ¡Uy! Ya, no es para tanto, ya me iba.
¿Cómo cambian de color los animales?
Bueno: “cómo cambian de color los animales que cambian de color”
Este video es presentado por Platzi, la plataforma de educación online que te enseña
todas las habilidades para triunfar en la nueva economía digital.
Pueden hacerlo para demostrar su estado de ánimo, regular su temperatura, intimidar
a un rival, impresionar a una posible pareja y claro, para camuflarse. Ranas, arañas,
lagartijas, peces, y sepias son capaces de modificar su color. Pero también hay 21 especies
de mamíferos y aves, como el zorro ártico o la perdiz nival, que alteran el color de
su pelaje o plumaje según la estación ¡muy a la moda, ehh!
Todos los vertebrados tenemos un reloj en nuestro cerebro: el núcleo supraquiasmático.
Este reloj se rige de acuerdo a la cantidad de luz que perciben nuestros ojos (y posiblemente
nuestra piel). Los animales que mudan su color saben que el invierno se acerca porque los
días se van haciendo más cortos y la cantidad de luz que reciben es menor. El núcleo supraquiasmático
manda señales a la glándula pineal y esta comienza a producir una hormona llamada melatonina.
La melatonina inhibe otra hormona, la prolactina. La modificación de los niveles de estas dos
hormonas produce un pelaje denso, largo y blanco. Conforme los días vuelven a ser cada
vez más largos disminuye la cantidad de melatonina y aumenta la ©, los animales vuelven a ser
pardos. Este pelaje que va de acuerdo a la estación les permite camuflarse en cualquier
época del año, ya sean depredador o presa. El calentamiento global ha provocado una disminución
en la cantidad de nieve que cae cada año. Lo que antes los ayudaba a camuflarse, ahora
los convierte en un blanco fácil. Pero hay animales que pueden cambiar de color
mucho más rápido. Algunos pulpos son unos maestros de este arte. En su piel tienen unas
células llamadas cromatóforos. Estas células contienen un saquito lleno de pigmento que
puede ser rojo, amarillo o negro. Alrededor de cada cromatóforo hay fibras musculares.
Cuando estas fibras se estiran hacia afuera hacen que ese saquito interno se expanda y
el color sea más visible, cuando se relajan el saquito se contrae y el pigmento es menos
visible. En los pulpos, cada cromatóforo está unido a un nervio lo que permite controlar
cada célula individualmente. Además, tienen otras células llamadas iridóforos que en
su interior tienen cristales y reflejan luz y leucóforos que contienen gránulos y reflejan
los colores de su medio. Adoptando así un sinfín de patrones. Junto con su capacidad
de cambiar su textura y acomodar sus tentáculos para variar su forma se vuelven casi invisibles.
Aunque muchos animales modifican su color gracias a los cromatóforos hay otros que
usan diferentes mecanismos. Hippolyte varians es un camarón que se camufla a base de dieta.
Sí, según las algas de las cuales se alimenta varía su color. ¡Realmente eres lo que comes!
No todos los animales cambian de color para camuflarse. Los camaleones cuando están tranquilos
son de color verde, su color y forma los ayuda a esconderse muy bien entre las hojas de los
árboles. Alteran su color para demostrar dominancia o para atraer a una hembra. O sea
que no, no cambian a cualquiera que sea el color que los rodea, como en las caricaturas.
Su piel está conformada por 3 capas; la primera tiene cromatóforos amarillos y rojos, y debajo
de los cromatóforos rojos hay... más cromatóforos rojos, pero debajo de los cromatóforos amarillos
hay iridóforos, como los de los pulpos, con cristales sumamente ordenados. Cuando estos
cristales están muy juntos, absorben el espectro de luz que va del rojo al verde y reflejan
luz azul. Esta luz y cromatóforos amarillos hacen que veamos a los camaleones verdes,
¡ los camaleones no tienen pigmentos verdes! Cuando los cristales se separan, reflejan
luz verde, y así conforme se separan cada vez más, los cristales reflejan diferentes
colores. La tercera capa contiene cristales grandes, desorganizados y espaciados, aquí
se reflejan ondas del tipo infrarrojo probablemente un mecanismo para dispersar calor.
Otros animales cambian de color para aparentar que son peligrosos. El escarabajo Charidotella
egregia es de color dorado, pero puede volverse rojo en unos segundos, como diciendo ¡no
me comas soy venenoso! Las alas de estos escarabajos están formadas por una capa protectora de
quitina. Debajo, hay estructuras escalonadas que generalmente están recubiertas por líquido.
El líquido encapsulado por las alas actúa como un espejo reflejando la luz haciendo
que el escarabajo se vea dorado. Cuando el escarabajo presiente peligro contrae sus alas
haciendo que el líquido pase de sus alas a su cuerpo a través de unos canales, dejando
a la vista las capas inferiores las cuales tienen un pigmento rojo.
Los calamares de Humbolt cambian de color para comunicarse. Estos calamares tienen pequeñas
células en su cuerpo llamadas fotóforos, capaces de producir luz azul. Arriba de los
fotóforos también tienen cromatóforos, las células del color. Utiliza sus fotóforos
para iluminar sus células pigmentarias y hacerlos visibles en la oscuridad. Este mecanismo
les permite tener un lenguaje complejo que usan para ponerse de acuerdo para emboscar
y cazar a sus presas. Hormonas, pigmentos, dieta, estructuras, bioluminiscencia,
estructuras, absorción y reflexión de la luz, cada animal tiene su mecanismo o combinación
de mecanismos para cambiar de color. Todo un mundo que nos falta comprender mejor. ¡Curiosamente!
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