Arrecife Alacranes, olas de vida. -Documental (1)
Hay ecosistemas en nuestro planeta que juegan un papel vital en la continuidad y equilibrio de
los procesos evolutivos y ecológicos. En 1872 se declaró el primer Parque Nacional, el Yellowstone.
Actualmente hay poco menos de trescientas mil áreas naturales protegidas. 17% de
la tierra y agua continental y 10% del medio marino están protegidos.
El bosque de La Primavera es un Area Natural Protegida que ha quedado como un oasis en
medio de la ciudad. Este importante ecosistema regula la temperatura y trae vientos y lluvia.
Debajo de nosotros se almacena el agua que aprovechan millones de personas de
la ciudad de Guadalajara. Estos oasis nos proveen de recursos y servicios. De
su conservación y protección depende nuestra existencia.
Uno de los ecosistemas mas importantes y del cual depende nuestra supervivencia son los arrecifes,
nuestra alimentación se basa en gran medida en que estos se encuentren en bunas condiciones.
Los arrecifes son como salas de maternidad y guarderías de peces,
diferentes especies se reúnen aquí para producir sus gametos y reproducirse. Una vez que nacen,
los corales son el refugio perfecto para crecer.
Aunque los arrecifes coralinos sólo cubren el 1% de los océanos, son el hogar de una cuarta parte
de todas las especies marinas conocidas. Además de ser lugares de gran diversidad,
también son una barrera natural que reduce el impacto de tormentas y huracanes.
Y los corales que mueren formaron las playas con arena que disfrutamos hoy en día.
Por estas razones su valor económico anual es de cientos de miles de millones de dólares.
A 140 kilómetros de la costa de Yucatán en México se encuentra un paraíso submarino.
Arrecife Alacranes es la estructura coralina más grande del sur del Golfo de México.
Tiene el doble de la extensión de la ciudad de México.
El primer encuentro con este arrecife fue en 1511 cuando una embarcación
española se dirigía de Panamá a Cuba. Los primeros días la navegación fue tranquila,
Al tercer día peces voladores cayeron a la embarcación,
para los marineros era una señal de mal agürio, se desató una tormenta con fuertes vientos
que encalló a la nave en el arrecife. Los sobrevivientes: Gonzalo Guerrero
y Jerónimo de Aguilar escaparon y llegaron a un territorio desconocido por los españoles,
la península de Yucatán. Unos años después hubo otro
naufragio en este mismo arrecife. Los sobrevivientes se alimentaron
de sangre y carne de tortugas y aves, Hasta que encontraron otra isla con agua que
les permitió vivir 135 días hasta su rescate. Después de estos sucesos Gonzalo Fernández de
Oviedo y Valdés en la “Historia General y Natural de las Indias” relata algo así:
“Llámese Alacranes, porque este animal es muy enconado y de gran dolor su veneno y por ser tan
malo y peligroso se dio este nombre de Alacrán o Alacranes a las isletas que tengo dicho, de quien
aquí se trata, porque a los que por allí aportan y dan en ellas, los hacen morir dolorosamente...”.
Desde entonces las tormentas han arrastrado a más de una docena de navíos a Arrecife Alacranes.
Uno de ellos era una embarcación que transportaba
columnas griegas para el palacio de bellas artes de la ciudad de México.
Si se anticipa la tormenta, es una excelente zona de refugio.
Barcos piratas y españoles lo usaron para resguardarse durante las tormentas.
Estamos en isla Pérez, una de las islas de Arrecife Alacranes. Oceana
nos ha invitado a conocer la salud de este arrecife. A través de un censo de peces,
extracción de ADN ambiental e imágenes digitales del fondo
podremos saber las necesidades, así como los beneficios de este arrecife.
Queremos saber cómo se encuentra la salud arrecifal en este momento en el arrecife,
teniendo en cuenta que en Caribe hay una amenaza muy grande a las comunidades coralinas.
Los corales son animales marinos que viven en colonias. Se enferman como todos los seres vivos.
Generalmente por un cambio en las condiciones ambientales que les causan un estrés fisiológico.
Una de las actividades humanas que está provocando grandes cambios, grandes impactos en los arrecifes
coralinos son la liberación de gases de efecto invernadero, como la carbonización del planeta y
esto hace que los corales justamente estén más frágiles, débiles y pueden ser más propensos
a enfermedades. También todos los nutrientes y contaminación que vienen desde la tierra hacia
el mar, eso también impacta y hace que haya más enfermedades, porque también traen patógenos,
esas descargas desde el continente. Si sumas que los corales están débiles
y que puede haber una proliferación de microorganismos patógenos pues se combina
todo para ser que los corales se enfermen. Pero estudiar los arrecifes es complicado y
visitar lugares tan alejados como Arrecife Alacranes, requiere de una expedición
y equipo. Las condiciones son difíciles
y las respiraciones están contadas.
Todo empieza en el barco, nos preparamos, vemos que tenemos todo el equipo tanto de buceo como
de monitoreo. Y lo primero que hacemos es al entrar al agua hay como una boya que señala
el sitio y cerquita de la boya empieza uno de los transectos entonces básicamente amarramos
el una parte del trayecto a algo que esté como sólido y empiezo a dejar que corra el transecto y
mientras corre el transecto de 50 metros yo estoy evaluando los peces en la columna del agua y dos
metros su especie, la cantidad de individuos que veo y también un estimado de su talla.
Esos datos los tomamos en una hoja de datos submarina. Luego lo pasamos a la computadora,
vamos poniendo especie, su talla y la cantidad aproximada en base a la talla.
Actualmente nuevas técnicas han facilitado las cosas, es posible tomar fotografías y a través
de ellas llevar un área de arrecife al laboratorio a través de imágenes.
Con las fotografías y con las cámaras que se toman, con las que se capturan fotografías en
alta resolución, lo que generamos son modelos 3D que nos permiten generar fotoproyecciones
nos permiten hacer zoom en ellas y poder medir hasta unos cuantos milímetros de distancia,
poder medir y poder observar afectaciones o enfermedades. Esta información queda como
un registro fotográfico a largo plazo en el cual en estos momentos solo basta bajar
en una hora de buceo para tomar todas estas fotografías y queda a posteridad.
Se deja una marca para volver año con año a los mismos sitios y ver cómo estos han cambiado.
Sabemos más del espacio que del océano porque nuestro tiempo bajo el agua y el espacio que se
puede abarcar son muy limitados. Nuevas técnicas nos permiten
conocer indirectamente la vida que albergan estos tesoros submarinos.
El proceso inicia con una toma de muestra en el mar. Entonces lo que hacemos es buceando con
equipo Scuba, tirarnos al agua 15, 20, 30 metros y llevamos unas botellas en donde abajo del agua
las abrimos y colectamos muestras cuatro litros de agua. La maravilla de este método es que no
necesitas capturar a los animales ni a las plantas, sino simplemente muestras del agua
que está rodeando a estos animales. Esta técnica pues se basa en el principio de que cualquier
animal o cualquier individuo que esté en el agua deja ADN, incluyéndonos nosotros. Esas
muestras las traemos aquí a la superficie del barco y a partir de aquí las filtramos.
Tenemos un sistema de filtración, en donde a través de un papel muy fino que son punto
cuatro micras, podemos recolectar como una coladera las moléculas de ADN que
están presentes en esa muestra de agua. Sabemos que el ADN dura en el agua de mar,
un promedio de dos o tres días. Lo cual puede ser bueno porque podemos detectar
especies sin tener que movernos demasiado o especies de profundidad. La huella que
detectas del ADN depende de el movimiento del agua. En el laboratorio lo que hacemos
es este papelito que tiene las moléculas de ADN lo metemos en un tubo con una serie
de soluciones y enzimas para terminar de romper todas las células, liberar el ADN.
Después utilizamos algo que se parece a un anzuelo molecular que tiene una especificidad muy alta
para un gen que tilizan todos los organismos vivos para hacer proteínas. Ese gen lo podemos
amplificar millones de veces con una técnica de PCR. Ese fragmento lo mandamos a secuenciar.
Una vez que tenemos la secuencia del organismo hacemos algo que se parece mucho a una búsqueda
de Google, en donde insertas tu secuencia con ATCGG, etcétera Lo pegas, le das a buscar.
Igual que Google te da una serie de resultados, esos resultados te van a
dar un match de un porcentaje 100% de similitud 99, 90, 80. Y esa similitud
te va a ayudar a hacer una identificación. Si no hay un match del 100%, tu sabes que
tiene un 80% de similitud con una especie de langosta. Sabes a qué familia pertenece.
Sabes qué es un crustáceo que tiene diez patas, que vive pegado al fondo ¿No? aunque
no sabes cómo es, cómo se ve, cómo se llama, pero puedes identificarlo.
Estas listas de especies nos van a permitir saber cuáles son las zonas más ricas que
están presentes aquí, donde hay más diversidad. La biodiversidad juega un papel muy importante
en nuestras vidas y aunque a veces no nos damos cuenta, si nosotros en este planeta no tuviéramos
la diversidad de plantas y animales que tenemos este planeta, no sería como esta si no tendría
la cantidad de oxígeno, ni de agua limpia, ni de alimento, ni de servicios ambientales,
ni la temperatura que tenemos aquí ahorita. Entonces necesitamos algo de diversidad para
poder vivir en este planeta. El tener un área protegida
te permite proteger esa biodiversidad y proteger las especies que están adentro.
Proteger lo que está adentro nos permite mantener un equilibrio afuera. Vemos a las áreas protegidas
como santuarios aislados y a veces se nos olvida que todo está conectado, para bien como para mal.
En Arrecife Alacranes, tan alejados de la
civilización podríamos pensar que los problemas no llegan hasta acá.
Pero vemos la huella que hemos dejado. En sus lejanas islas encontramos
residuos de todo el mundo. Y se han llenado de sargazo
Como el canto de sirena los pescadores son atraídos a estos lugares donde abundan los peces.
Solo en México 4 de cada 10 especies pesqueras están sobreexplotadas,
en deterioro o al borde del colapso.
Aunque Arrecife Alacranes cuenta con permiso de pesca tradicional en ciertas áreas. Observamos
pesca en zonas prohibidas y pesca con arpón mediante buceo, la cual es una práctica ilegal.
Si bien el arponeo está prohibido hay una especie que sí es posible cazar de esta manera.
No nos dejemos engañar por su majestuosidad,
el pez león es una especie invasora en el Golfo de México.
Es capaz de expandir su estómago y comer hasta 21 peces en 30 minutos.
Y tiene una predilección por las larvas. Por su voracidad implacable, la ausencia de
depredadores naturales y sus espinas venenosas, se incentiva su cacería.
Pero el resto de las especies son parte de un fino equilibrio,
Depredadores
y presas tienen un papel fundamental. Una de las especies clave en
estos ecosistemas es el pez loro. Constantemente limpia y se alimenta
de las algas que crecen sobre el coral, ayudando a que el coral siga creciendo.
La existencia misma del arrecife se debe a una especie clave: los corales.
A primera vista muchos parecen rocas coloridas Otros plantas
Estas formas solo son el esqueleto de carbonato de calcio de unos pequeños animalitos: los pólipos.
Si te parecen medusas al revés es porque son parientes de ellas.
Estos animales se alimentan de detritos, pero lo que alcanzan a
tomar con sus tentáculos ni siquiera es suficiente para mantener su existencia.
Han sobrevivido solo gracias a las zooxantelas, unos organismos
fotosintéticos que viven dentro de sus tejidos La zooxantela alimenta al pólipo con azúcares
que obtiene gracias a la luz del sol. Y el pólipo, además de protección, le devuelve
sus residuos en forma de compuestos nitrogenados, necesarios para el crecimiento de las zooxantelas.
Esta estrecha relación es lo que les ha permitido vivir por millones de años.