La Cabecilla del Parador Episodio 23
La República del Parador y el Perú, como todos saben, son dos naciones soberanas distintas, pero a la vez, somos primos.
Tenemos una historia entrelazada debido a que solamente hace noventa y dos años que nuestras dos naciones todavía eran una sola. Como todos saben luchamos juntos en la "Batalla de los Jabalíes" contra la flota española el siglo pasado y celebramos la misma fecha del día de la independencia, el veinte y ocho 28 de julio. Compartimos casi todas las mismas costumbres, compartimos en gran parte la misma literatura, la gastronomía, hasta hablamos el castellano utilizando las mismas expresiones, y hasta cuesta distinguir la diferencia entre los acentos. Me disculparán ustedes por la lección histórica.
Les prometo que no he venido aquí a aburrirles con aires de catedrático ya que sería inapropiado en este ambiente y también porque la retórica académica no es "mi fuerte". Basta decir que La República Democrática del Parador y el Perú en el año mil novecientos cincuenta y dos (1952) se sentaron en la mesa, y después de once días de negociaciones duras, pero a la vez, sinceras, firmaron el tratado, EL PACTO DE HERMANDAD. Para no entrar en todos los detalles, como dije anteriormente, hace unos minutos, El Perú y el Parador llegaron a un acuerdo de no interferir en los asuntos domésticos del otro. Claro que todos presentes aquí hemos observado que el Perú oficialmente ha cambiado de ideología, de misión en estos últimos dos años.
Los días del General Velasco, del acercamiento a La Unión Soviética, de la ingeniería social y la reforma agraria y luego, la gestión del General y Presidente, Bermudez. se supone que han acabado. El Presidente, Belaunde está de regreso, elegido democráticamente como presidente de la nación y vemos desde la isla que los peruanos han hecho grandes esfuerzos para atraer inversiones, empresas americanas y europeas. .......(una pausa larga.
El Presidente Ríos-Monte deja de hablar, respira profundo. Pasa más de un minuto de silencio---una eternidad) Me disculparán ustedes de nuevo.
La denuncia que mi colega, Sotana SaCasa y yo venimos a hacer aquí en contra de nuestro país vecino, El Perú, es una acusación muy seria. También como ustedes pueden notar, estoy un poco aturdido y apenado. Realmente no se me ocurren las palabras suficientemente aptas para describir la pena y el dolor que siento al presentar esta acusación en contra de mis hermanos peruanos. Les pido mis disculpas más sinceras.
Ahora, le cedo el asiento y le doy la palabra al señor embajador, Sotana SaCasa quien tiene los datos específicos acerca de la violación del Tratado, El PACTO DE HERMANDAD. (Alberto Ríos-Monte se levanta, se retira, cediéndole el asiento en la Mesa de los Delegados, y se sienta en uno de los asientos del público, especialmente reservado para el Presidente del Parador)
(Durante la reunión que Sotana y Luís Alberto tuvieron horas antes de la sesión plenaria, los dos se pusieron de acuerdo de que Luís Alberto sería el "buenachón" apenado y que Sotana SaCasa sería el "hachero", el que atacaría)
Embajador Sotana SaCasa:
Buenas tardes, Señores.
Yo no comparto los mismos sentimientos de mi estimado colega y mi presidente. En el mes del pasado noviembre, hubo un atentado en la región de Periquitos por las afueras de Aguas Calientes, la capital de dicha región. El día, 6 de noviembre, a las 8:39 p.m. a las ocho y treinta y nueve minutos, un batallón del ejército de los terroristas del Camino Encendido volaron las torres eléctricas que alimentan la ciudad de Aguas Calientes provocando un apagón. En esos mismos instantes hubo explosiones de cochebomba en distintas partes de la ciudad, se calcula que hubo más de veinte cochebombas que se reventaron matando a por lo menos treinta personas inocentes. Felizmente nuestros policías militares de la T.O.P.E. La Tropa de Operaciones Policiales Especiales de Periquitos respondieron de forma rápida y eficiente y lograron defender la ciudad previniendo la potencial masacre de centenares de civiles, padres, madres y niños, ciudadanos inocentes. La batalla entre la T.O.P.E.
y los asesinos comunistas duró un poco menos de dos horas. El presidente Ríos-Monte se vió obligado a declarar un estado de emergencia nacional imponiendo la ley marcial de inmediato, permitiendo así la participación y colaboración entre la T.O.P.E. y el ejército paradorense. A partir de las diez y treinta de la noche La T.O.P.E. en colaboración con el ejército, las fuerzas del orden lograron capturar a cuarenta y siete terroristas. Por lo tanto, los policías militares y los soldados del ejército paradorense lograron capturar y confiscar una gran cantidad de las armas que los terroristas han utilizado para asesinar a la gente inocente de la población........... -------------------------------------
(A las dos de la tarde, un grupo de hombres de la embajada del Parador llegó a la puerta principal de la Organización de los Estados Americanos.
Cuando Manuel Arias entró al edificio principal de La O.E.A.
el Panamerican Union Building por la puerta de la calle C (por el estacionamiento de los empleados) sabía que iba a ser una noche muy larga. El asesino, Ríos-Monte venía a hablar a la O.E.A. y a Manuel y a los otros tres guardias de turno los habían escogido para bajar de un camión tres cajas llenas de armas y llevarlas al Salón de los Delegados. Se suponía que esas armas que le tocaba a Manuel llevar y poner sobre la gran mesa de los delegados en un determinado momento durante el discurso del presidente paradorense y el embajador Sotana SaCasa eran de fabricación soviética. Manuel ya se imaginaba el cuento que el chupasangre Ríos-Monte iba a meter a la gente en el salón; que esas armas llegaron a las manos del Camino Encendido por medio de los cubanos, quienes supuestamente las llevaron a la isla clandestinamente y que esas mismas armas eran las que los terroristas utilizaron en el atentado el noviembre pasado en Aguas Calientes.