Las primeras medidas de Biden para revertir las políticas de Trump
Joe Biden no quiere perder tiempo.
Pocas horas después de jurar como 46 presidente de EE.UU, el flamante mandatario puso manos
a la obra y firmó 17 decretos y directivas, un récord histórico.
Por un lado, Biden quiere encarar cuanto antes la crisis económica y social que atraviesa
el país.
Por el otro, quiere revertir los cuatro años de políticas de Donald Trump, como había
prometido durante la campaña electoral.
Pero, ¿en qué se centran las medidas que Biden impulsa en sus primeros días como presidente?
En este video te contamos los principales temas sobre los que Biden quiere actuar de
inmediato.
Estados Unidos sigue siendo el país más afectado del mundo por la pandemia de coronavirus.
Ha registrado más de 24 millones de contagios, y más de 200.000 casos nuevos cada día y
más de 400.000 fallecidos a causa del covid-19.
Joe Biden había expresado en más de una ocasión que la lucha para frenar el contagio
de covid-19 sería la principal prioridad de su nuevo gobierno.
Y así lo confirman sus primeros pasos en la Casa Blanca.
Entre las numerosas órdenes ejecutivas que firmó está la que obliga a usar mascarilla
en edificios públicos de todo el país. Además, el presidente dio inicio al reto de usar cubrebocas
al menos por 100 días.
Y aunque hay consenso en que un presidente no tiene autoridad legal para de ordenar el
uso de mascarillas a nivel nacional, Biden dijo que hará lo posible para persuadir a
los gobernadores estatales que se han resistido a esta medida.
También nombró a Jeffrey Zients como coordinador de respuesta contra el covid-19, para que
haya una dirección y una guía desde el gobierno federal.
Y revirtió la decisión del gobierno de Donald Trump abandonar la Organización Mundial de
la Salud.
De hecho, el doctor Anthony Fauci, que hasta ahora era el referente científico del gobierno
en la lucha contra la pandemia, dirigirá la delegación de Estados Unidos en la OMS.
La pandemia ha golpeado duramente a la economía del país.
Hay más de 18 millones de personas sin trabajo y muchas empresas sufren las consecuencias
de las medidas de confinamiento.
Biden ya había anunciado un plan de US$1,9 billones para reactivar la economía.
Pero, a la espera de que el Congreso apruebe su plan, el presidente acaba de firmar órdenes
que pueden ser puestas en práctica de inmediato.
Por ejemplo, extendió una moratoria sobre los desalojos y las ejecuciones hipotecarias
de viviendas.
Amplió la pausa actual en los pagos e intereses de los préstamos estudiantiles federales.
Y aprobó una moratoria para el pago de las deudas estudiantiles hasta final de septiembre.
Otra medida que Biden tomó en su primer día en el cargo fue la de volver a unirse al acuerdo
climático de París.
Ese tratado global se firmó en 2015 con el objetivo de contener el aumento de las temperaturas
y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Trump decidió sacar al país del acuerdo y el pasado noviembre, un día después de
las elecciones, Estados Unidos se convirtió en la primera nación del mundo en salir.
Biden no solo firmó el retorno del país al acuerdo, sino que se ha comprometido a
alcanzar estándares más altos en medidas de mitigación climática
y a convocar una cumbre mundial sobre el clima dentro de los primeros 100 días en el cargo.
Mientras, rescindió de inmediato el permiso para el controvertido oleoducto Keystone XL,
un proyecto que permitiría transportar petróleo desde Canadá.
La cuestión racial es la cuarta crisis, junto al covid-19, la economía y el cambio climático,
que Biden dijo que debía abordarse rápidamente.
El presidente exige un esfuerzo de todas las agencias del gobierno para acabar con el "racismo
sistémico".
También se comprometió a abordar las disparidades raciales en vivienda y atención médica.
Por otro lado, una orden ejecutiva firmada en su primer día como presidente prohíbe
la discriminación laboral en el gobierno federal basada en la orientación sexual y
asegura protección para la comunidad LGBTQ.
En un acto cargado de simbolismo, en su primer día en el cargo Biden detuvo la construcción
del muro fronterizo entre EE.UU. y México, uno de los proyectos más representativo de
su predecesor.
Y para que la distancia con Trump fuera más evidente, Biden también eliminó la prohibición
de la entrada a EE.UU. que afectaba a personas de países como Irán, Libia, Somalia, Siria,
Yemen, Venezuela y Corea del Norte.
Pero las decisiones en ámbito migratorios no se limitaron a medidas simbólicas.
Biden propuso un proyecto de ley que establece un camino hacia la ciudadanía para más de
11 millones de inmigrantes indocumentados.
Y se comprometió a evitar la deportación a los inmigrantes que llegaron como indocumentados
cuando eran niños, los llamados Dreamers.
Otra orden ejecutiva revoca el plan de excluir del censo a los que no son ciudadanos, y otra
acaba con el agresivo esfuerzo de la administración Trump por encontrar y deportar a inmigrantes
indocumentados.
Los objetivos de la administración Biden son sin duda muy ambiciosos, aunque no son
pocos los desafíos que tiene por delante para poder cumplirlos.