Este Coche NO Mide lo que Parece
Los humanos somos unos pringaos.
Pensamos que percibimos la realidad tal y como es en el presente, cuando lo vemos todo
algo distorsionado.
Y es que los sacos de carne que nos forman solo pueden enterarse de que algo está pasando
cuando un mensajero nos lo chiva.
Por ejemplo, la luz.
Y dado que todo mensaje tarda un tiempo en recorrer el espacio eso nos condena a ver
el mundo con cierta demora.
Si una estrella de nuestro vecindario estallara ahora, su luz tardaría años en llegar hasta
nosotros y así saber lo que ha pasado.
Y tampoco tengo que irme tan lejos: si estás viendo esto desde un móvil, entre la pantalla
y tu debe haber unos 30 cm.
Eso quiere decir que la luz de tu móvil tarda más o menos un nanosegundo en ir desde la
pantalla hasta tus ojos.
No estás viendo lo que está pasando en la pantalla ahora, estás viendo lo que pasó
hace un nanosegundo.
Es poquísimo, pero eso no quiere decir que no pueda inducir a errores.
Imaginate que pasara de largo delante de ti un coche y quisieras saber cuanto mide.
Una manera de averiguarlo sería tomando una foto del coche y, teniéndolo ahora quieto,
medir su longitud.
Este parece un procedimiento correcto, pero realmente no se ha tenido una cosa en cuenta:
la distancia aqui medida no es la real.
Esto es porque los rayos de luz que emiten cada extremo del coche no llegan a la vez
a tus ojos, uno llega antes que el otro porque está más cerca de ti.
Eso quiere decir que no solo estamos viendo una imagen del pasado, como ocurría con el
móvil, si no que cada parte del coche es una imagen de un momento en el tiempo distinto.
Cuanto más te mueves a la parte trasera, más en el pasado estás viendo el coche,
pues esos rayos de luz han sido los que más han tardado en llegar hasta la camara.
Pero es que además el coche se movía, luego las partes más en la pasado también se encuentran
posicionadas más atrás.
Literalmente es como si hubiéramos fotografiados los distintos trozos del coche a medida que
se movía y después los hubiéramos pegado.
Vamos, que esta foto refleja un coche mucho más largo que el real.
Y es que para poder medir correctamente cuánto mide algo uno que tiene que saber dónde se
encuentran cada uno de sus extremos en el mismo momento del tiempo.
Si primero mido uno y después de un rato mido el otro estaré falseando la medida.
Esto es lo que ocurre con la foto del coche.
Pero tampoco os preocupeis demasiado, este efecto es super pequeño.
La luz es tan rápida a nuestras escalas que esa diferencia de tiempo entre extremos es
ridícula.
Midiendo así solo estaríamos fallando, como máximo, en el tamaño de cuatrocientos átomos,
o sea na'.
Pero si nuestra percepción del mundo recayera en el sonido (algo bastante más lento que
la luz) y, por ejemplo, pudiéramos distinguir el sonido de la rueda de delante respecto
a la de la detrás, mediríamos el coche con un error casi de hasta medio metro.
La experiencia sería algo así: el coche se dirige hacia ti dilatado, con ese medio
metro de más, pero a medida que se acerca a ti va poco a poco recobrando su tamaño
real, ya que al estar más próximo de ti esa diferencia entre los dos caminos se va
reduciendo, siendo iguales cuando el coche está justo delante de ti.
Pero una vez el coche se le aleja, este fenómeno se invierte.
Ahora es la parte delantera del coche la que está más lejos de ti, luego está más en
el pasado que la trasera.
Y estar en el pasado significa estar más atrás, luego el coche en vez de dilatarse
se contrae; otro medio metro.
Guay, ¿eh?
Y este efecto “sónico” se vuelve loquísimo cuando tratamos con aviones supersónicos.
Ya no solo es el hecho de que sentiríamos que el avión está mucho más atrás de dónde
está realmente, es que por su alta velocidad esa información sonora está muy deformada.
A la velocidad habitual, el avión puede aparentar ser hasta tres veces más largo viniendo hacia
nosotros y hasta tres veces más pequeño a su ida.
Me encantaría ser un murciélago para poder sentir eso.
En definitiva: sí, somos unos pringaos.
Nuestra percepción del mundo no es perfecta.
Pero ¿sabéis qué es lo mejor?
Que aunque fuéramos seres todopoderosos capaces de ver todo lo que sucede en el Universo en
ese mismo momento sin la necesidad de luz, sonido o cualquier cosas, aunque ni siquiera
la luz y el sonido existieran… La verdad es que este efecto volvería a atormentarnos.
Pero eso lo veremos en el próximo vídeo.
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Y gracias por verme.